F R A G M E N T O S D E U N D I A R I O D I S C O N T I N U O




"Y como yo no cuento una historia, sino simplemente desgrano imagenes, no podran reprocharme que solo propongo fragmentos, queda entendido que lo que se expresa no es de propiedad privada afortunadamente, que no son originales ni siquiera los puntos suspensivos y menos aun las admiraciones..."



23.5.12





Hace 48 horas que dejaste de ser un desconocido para convertirte en mi amigo,
hace 24 horas que dejaste de ser mi amigo  para ser mi cómplice,
cómplice de minutos silenciosos... secretos
cómplice de deseos que inhala y exhala mi piel...
cómplice de mi paranoia
pues has hecho de ti,
el punto equidistante de todo
incluso de nosotros mismos...
-solo una palabra-
-una letra-
-una-
nada...

13.5.12

" ABRIL ENFERMA "



Harta de intentar luchar contra el empeño que pongo en desoir lo que tengo para decirme, mi cuerpo ha resuelto tomar el mando sobre mi misma. Entonces, durante estos últimos dias mi organismo se dedico -caprichosamente- a hablarme a traves de sintomas.

Yo, aun sorda, juego a ponerme tapones en los oidos, llamando a mi amiga medico -quien especializada en medicina por telefono- analiza y traduce lo que me sucede de la siguiente manera:

EL HECHO: Mujer, 24 años, despeinada y enferma.

LOS SINTOMAS: 72  horas de fiebre ininterrumpida que oscila entre los 38 y 40 grados centigrados. Ganglios inflamados. Dolor de cabeza y molestia muscular, sobre todo en la zona de la espalda y cuello.

EL DIAGNOSTICO: Resfriado y tos.

LA RECETA: Amoxicilina 500 mg mas ibuprofeno 100mg cada 6 horas.

RECOMENDACIÓN: Reposo, intentar usar lo menos posible las cuerdas vocales.


Ahora bien, si el cuerpo me habla y me dice cosas, difícilmente sea un medico que poco me conoce quien pueda deducir exactamente que es lo que digo cuando mis cuerdas vocales quedan inutilizables por 5 días... con lo cual intento sincerarme conmigo y traducir yo misma la situación, mas o menos de esta manera:


EL HECHO: Estoy muriendo. Siento que casi no me quedan días de vida. Lo poco que queda, lo veo escurrirse entre mis manos y eso se transforma en la desgraciada constancia de todo lo que me quedo por hacer ... pero ya no tengo tiempo...


LOS SINTOMAS: Hace una infinidad de días tengo una fiebre que me hace desvariar. Me duele la piel, la carne, la cabeza me estalla en microátomos de ilusiones sin sentido. Lloro. Lloro porque me duele sentirme mal, y porque no lo puedo evitar. Me sale el llanto desde adentro, como un volcán en erupción lleno de lagrimas afiebradas y calientes. Lagrimas tristes y melancólicas.


EL DIAGNOSTICO: Te extraño, siento como si fuesen infinitos cada uno de los minutos que no estas a mi lado. Y al contrario de mis propias predicciones que me aseguraban que te extrañaría cada día un poco menos, resulta que te extraño cada día un poco mas.


LA RECETA: Tu presencia, mi cuerpo envuelto en tus brazos, tus piernas enredadas en las mías, tus besos en mi boca. Mi cabeza apoyada en tu pecho. Tu palabras jugando con las mías, nuestras risas envolviendo la habitación, mis manos siguiendo el contorno de tus muslos, tus manos trazando caminos entre mis senos.


RECOMENDACIÓN: Reposar contigo en mi cama por tiempo indefinido, tu voz... y un poco de la mía, hacer lecturas de tus manos acostada en el sillón. Escuchar tus te amo pronunciados cerca de mi oído, hablarte de amor después de hacerte el amor, hacernos chistes ridículos para no parar de reírnos, acariciar tu pelo mientras te recuestas en mis piernas... y todas esas cositas... hasta que me mejore, hasta que se me pase,  hasta que queramos, hasta que nos aburramos, o quizás solamente cambiemos de escenario.


Y si no se puede, bueno... vuelvo a ponerme los tapones en los oídos perceptivos, me dedico a tomar antibióticos y chau... supongo que en algún momento se me pasara y cada tanto me seguiré enfermando para recordar lo que siento y punto.