Sentir.
Dejar de vivir para sentir.
Siempre pensé que en las noches me abandonan las estelas de sueños porque siempre me acompañan despierta
Aquí se habla el idioma meditabundo, quisiera saber si tu también lo hablas.
Algunos ni lo imaginan, lo leen en cuentos o les pasa desapercibido, otros somo imanes de historias, de novelas y cuentos que no nos creerán.
Me persigues, vienes a la ducha, a la cama, me haces el amor en las sillas, en todas las calles y avenidas, penetras mis sentidos, mi desquicio, penetras mi totalidad.
Tu te montas en otras noches, otras lunas, otros nombres...
Yo cocino libertad en mi mp4 y fotografió estas letras que se pasan tan rápido.
Pinto tus inclemencias que borran las nubes unas horas después.
Ruego al viento porque me regrese tu nombre... tu nombre... solo quiero tu nombre
para explicarte con palabras de este mundo
que partió un barco de mi
L L E V A N D O M E....
Me gusta lo que escribes últimamente.
ResponderEliminarMantienes tu estilo pero, sin duda, más depurado y profundo.
Ese corazón tuyo galopa en "noches y lunas cocinando, fotografiando y pintando en busca de un nombre al que poder explicarle sus locuras". Sí, me gusta.
Un abrazo, querida amiga.
hola,he encontrado yu blog por casualidad y me ha cautivado,jejeje.
ResponderEliminaresa cancion que has puesto ,nunca la habia escuchado...TE SIGO¡¡,jejejeje